A mi primo le gusta estudiar en un barracón.
Con su amiga la rata y su seta en el cajón.
Cuando llueve se inunda y así aprende natación.
¡Larga vida al genio que los inventó!
A mi primo le toca este año un barracón.
Es nevera en invierno y en verano un tostador.
Si te cae el lápiz al suelo el musgo toma posesión.
¡Ni en la selva puedes pasarlo mejor!
A mi primo le encanta estudiar en un barracón.
No es un fallo del gobierno sino simple evolución.
Si te quejas al ministro te sale un contestador.
Larga vida al genio que los inventó.
Las mates molan porque cuentan cucarachas.
Y en naturales tratan de diseccionarlas.
En lengua juegan a buscar el nombre exacto,
del tufillo ambiente rancio putrefacto.
En plástica arreglan las grietas y goteras.
En geografía aprenden el mundo de afuera.
En religión rezan por que no caiga el techo.
Y por fin en medio llegó el recreo.
Sí querías lujo, haberte ido a un privado.
Un cubo de plástico sale mas barato.
Se ve que al quitarles la mili algo tenían que poner,
para que mi primo madurase bien.
A mi primo le gusta estudiar en un barracón.
Telarañas en el techo y en la esquina un champiñón.
El vapor de las ventanas no causa ningún tumor.
Las chinchetas ya no cumplen su función.
Y mi primo disfruta cuando cuenta su versión.
En su libreta ves manchas de una rata que meó.
Lo que se ahorran en paredes va al sueldo de algún cabrón.
¡Larga vida al genio que los inventó!
Era una solución pensada a corto plazo,
pero como ya están ahí pa qué cambiarlos.
Hace ya tiempo que mi primo está algo pocho,
el mercurio ambiente marca trenta y ocho.
Sí querías lujo, haberte ido a un privado.
Un cubo de plástico sale mas barato.
Se ve que al quitarles la mili algo tenían que poner,
para que mi primo madurase bien.
No hizo falta pensar mucho para poner solución,
al problema de las aulas y su masificación.
Se ve que algún ministro tiene acciones de las que,
puede sacar gran tajada a costa de trucar la ley.
Pero a mí lo que me ha molestado es que se juege con los críos.
Es un deber del Estado dar aprendizaje digno.
No son condiciones para la educación,
encerrar a los alumnos en un mierda-barracón.
A mi primo le enseñan mates en un barracón.
Cuando va a abrir el almuerzo la empanada se licuó.
Si en el doble suelo encuentras contrabando no fui yo.
La primaria y la ESO, ambas bajo el sol.
A mi primo le encanta ese horrible barracón.
Según el alcalde no va contra la Constitución.
Como ocupan todo el patio la gimnasia se abolió.
¡Larga vida al genio que los inventó!
Sobre el techo y su derrumbe hay apuestas en acción.
¡Ni en la selva puedes pasarlo mejor!
Y mi primo disfruta cuando cuenta su versión.
Los decoran con esmero cuando pasa el inspector.
La otra opción que les quedaba es ocupar el comedor.
¡Como goza el crío en su barracón!