A dónde vas,
luna de día,
resbalando equívoca los horizontes.
A dónde vas,
pálida y fría.
A dónde vas,
luna de día,
luna de barro y soledad.
A dónde vas negando el sol,
qué oscuridades quieres rescatar,
en qué tapete negro probarás fortuna,
si en las esquinas no te dan voces
y en las cantinas no te reconocen,
luna.
A dónde vas,
de tapadillo,
huérfana de espejos y lentejuelas.
A dónde vas,
sin lazarillo.
A dónde vas,
de tapadillo,
llena y en vela..