El terror de la frontera


(Que se escondan toditas las mujeres,
Y los hombres detrás de ellas
Llego el terror de la frontera)

De su buen caballo bayo,
Se bajo tirando un brinco, y traiba su pistola al cinto,
Y ya con los pies en tierra,
Sus espuelas van sonando, y su paso van marcando

Su mirada desconfiada,
En su cara van mostrando, intenciones que llevaba
Pero las disimulaba,
Con su tabaco mascando, pa escupir de ves en cuando

No se asomen, vecinos del poblado,
Que se escondan toditas las mujeres,
Las espuelas que se oyen arrastrando,
Placeres y muerte van cantando

(Tía, tío, no dejen salir a las primas)

Quedo la calle desierta, nadie atrás y nadie enfrente
Más la gente estaba alerta,
Pues volvía de repente, aquel hombre endemoniado,
Que por muerto lo habían dado

Al llegar a la cantina, se paro hasta la rocola
Y corrió toda la bola, porque todos ya sabían,
Que cuando el hombre escupía,
Lo hacia también su pistola

Vuelen, vuelen, palomas mensajeras
A correr la voz de la tragedia,
Los cobardes viven toda la vida,
Los valientes, se mueren donde quiera

(El cobarde le saca al pleito, vive
El valiente le entra, muere,
Ya estamos quedando muy pocos prima)

Cuando se acerco a la barra, el cantinero sudaba
Por tantito y más lloraba, pidió una cerveza fría
Y pa pagar lo que debía, su pistola le sacaba

Siendo de cantina el dueño,
Ya pensaba el cantinero, que lo querían matar
Pero al no traer dinero, solo deseaba el fuereño,
Su pistola empeñar

(Que pelado tan corriente,
Ya no sabe uno ni con quien se topa uno en las cantinas
Que mala clientela hay, se han fijado).