Para escribir una carta, se necesita papel,
Y valor pa’ hacer las cosas, como las hizo Raquel
Bernardo de esta no espero, ninguna contestación
Solo te pido amor mío, me acompañes al panteón
Me voy a quitar la vida, tú ya sabes la razón,
Que a pesar de tú perfidia, te perdono tú traición
Ante la virgen juramos, hincados en el altar
Hasta la muerte adorarnos, uno al otro, sin fallar
Yo cumplí mis juramentos, el tuyo en nada quedo,
Si por otra me cambiaste, esto no lo aguanto yo
Al terminar esta carta, dos tiros se dio Raquel,
Y alcanzo a poner el nombre, de Bernardo en la pared.