Te siento respirar
lejos de tu lugar
hoy tuve un sueño con vos,
¡Qué locos éramos los dos
en los buenos tiempos!
Vos deseabas salir
de tu eterno jardín,
yo de mi tonto fulgor,
cuando encontramos era el fin
y la vida el motor.
La línea blanca se terminó
no hay señales en tus ojos
y estoy llorando en el espejo
y no puedo ver.
A un hábil jugador
trascendental actor
en busca de aquel papel
que justifique con la acción
toda fantasía.
Que toca el saxofón
mientras su inspiración
baila tu forma de ser
que desintegra con un blues
esta oscura prisión..