Hoy quiero enseñar a mi soledad a vivir sin esperar propinas por amar.
Hay tanto de mi que quiere llorar pero mis llantos vendí entre las piernas de un bar.
Y cada noche mi amor, conduzco al olvido hacia un colchón y aparco besos sin calor, en un cuerpo.
Ceno con mi dolor, desayuno mi compasión y engaño al olvido
¡mi amor!
Con un cuerpo.
Hoy me visitó aquel que un día fui y el espejo me contó que la
tristeza no es el fin.
Y si he de viaje, que no aparque más en doble fila la pasión, sólo en tus brazos y sólo por amor.
Y cada noche mi amor, conduzco
al olvido hacia un colchón y aparco besos sin calor,
en un cuerpo..
Ceno con mi dolor, desayuno mi compasión y engaño al olvido
¡mi amor!
Con un cuerpo.
La ironía es la tristeza que al no saber llorar sonríe cuando quiere hablar.
Y si la vida nos da otra oportunidad, volveré a hacer el amor.