Chupa tu matecito el hambre se va,
solo por un ratito el hambre se va
las manos rechazadas, la cabeza cansada
y Dios que no se ha vuelto a mirar acá.
Con los zapatos rotos a caminar,
el hambre en cada esquina y a caminar,
no hay pan para mis dientes, en la ciudad caliente
solo esta angustia para masticar.
Qué le diré a mis hijos al regresar,
qué le diré a mi madre que no da más,
el frío del invierno y el frío del gobierno
y la esperanza seca de esperar.
Chupa tu matecito el hambre se va,
solo por un ratito el hambre se va
y así andamos millones, cansados no cagones,
y la paciencia se va a terminar..