Sí...
En este tren de los locos a quién le puede importar
lo que digan los pocos con credencial de pensar.
En el convoy manicómico a quién le va a interesar
los letreros de señales dispuestos a hipnotizar.
Loco el conductor y los fogoneros,
esquizoide tren con todo y pasajeros.
El tren de los locos va rolando por la eternidad,
espéralo en Marte, por ahí va a pasar.
El tren confuso va chocando en el espacio ya,
tomó su gas en Venus, se fue sin pagar.
Sí...
En este tren de los cuerdos hay demasiada importancia
por las cosas que no sirven pero tienen elegancia.
En el convoy realidad hay demasiado interés
por la mentira aburrida y la visión al revés.
Cuerdo el conductor y los fogoneros,
realístico tren, con todo y pasajeros.
El tren de los cuerdos ve sobre un solo carril,
lo ampara la plata y el plomo del fusil.
El tren sentado esgrime y escupe su ley.
Siempre estáte al tiro porque te hacen güey..