SEÑORA SOLEDAD
(Bella signora)
Llega siempre de noche tan seductora, sí,
Entra en casa segura,
Se sienta al pie de mi cama, escrutadora, y,
Luego se desnuda.
Háblame de ti, bella señora,
Háblame de ti que no tengo miedo,
Háblame de ti, de tus silencios,
Háblame de ti y de tus amantes,
Y de tus amantes.
La he visto tras el espejo por la mañana, sí,
Tan encantadora,
Yo cepillaba mi pelo, ella me acompañaba, y,
Me ha dejado sola.
¿Piensas que me he ido?
Tan sólo por un minuto,
Ya volveré,
No es tan seguro,
Sé que me buscarás,
¡El dolor no se busca ni el valor se asusta!
Háblame de ti, bella señora,
De tu mar secreto, de tu noche oscura,
Yo te encuentro bella como una escultura,
Señora soledad,
¡Señora soledad!
Háblame de ti, bella señora,
Háblame de ti que no tengo miedo,
Háblame de ti, de tus silencios,
Háblame de ti, de tus apartamentos.
Te voy buscando de noche en las sombras de las discotecas,
Por las mañanas bajo el sol, en esas playas de gente.
¿Piensas que me he ido?
Tan sólo por un minuto,
Ya volveré,
No es tan seguro,
Sé que me buscarás,
¡El dolor no se busca ni el valor se asusta!
Háblame de ti, bella señora,
De tu mar secreto, de tu noche oscura,
Yo te encuentro bella como una escultura,
Señora soledad,
¡Señora soledad!
Háblame de ti, bella señora,
Háblame de ti que no tengo miedo,
Háblame de ti, de tus silencios,
Señora soledad,
Señora soledad,
Señora soledad,
¡Señora soledad!
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