Hagámoslo de mar,
de espuma y agua clara
hagámoslo tú y yo
entre la madrugada.
Y de puntillas pasará
y vendrá a mí
a enredarse en mis enaguas
¡Cuánta belleza ha de regalarme!
Hagámoslo de pan,
de trigo y de manzanas
tan delgado como tú,
criatura de mis nanas.
Y de puntillas pasará
a dormir aquí,
entre mimos y nostalgia
¡Cuánta belleza ha de dedicarnos, sí!
Hagamos un milagro
en el hueco de mis manos,
con la miel de tu ser.
Hagámoslo pequeño
con tus ojos y mi pelo
y el amor a sus pies.
Y de puntillas pasará
a vivir aquí
rodeado de ternura
¡Cuánta belleza hemos de darle tú y yo!.