Duerme Femés
y en el silencio
sólo los ladridos de los perros.
Nada se ve
sólo las sombras
saben la verdad de las historias.
Nada se podría
comparar a esa mujer
Mararía.
María, Mararía.
Nada florece,
todo se esconde
sólo lava y sol cuando amanece.
Duerme Femés,
se para el tiempo
y el dolor te quema como el fuego.
Nada se podría
comparar a esa mujer
Mararía.
María, Mararía.
Arde Femés
y un grito rompa
las aguas tranquilas de la noche.
El animal
duerme y descansa
hasta que la rabia se desata.
Nada se podría
comparar a esa mujer
Mararía.
María, Mararía..