Dos cruces redondas, agua en llamas, ojos sin cicatrizar
castillos de alambre, mar adentro, túneles llenos de sal
la brújula no tiene dueño, mi sombra atrapada dentro mío, ¿dónde voy a reflejar mi oscuridad?
ya te hice las mil canciones que te debía, ¿para qué seguir hurgando en mi dolor?
si no pudiera cantar, ¿cómo haría para llorar?
sin la esperanza en tus ojos, ¿cómo haría para caminar?
si el aire está suelto, por favor que nadie lo vaya a juntar
no supe sostener la luna y se partió en el agua
tu pelo está triste; mi amor ¿dónde te puedo esconder?
te acaricio las manos, un banco de arena en el medio del mar
ansia en tus ojos verdes, los espejos aceleran y no te dejan pasar
en tu mundo de seda lavando tu corazón
con lágrimas tranquilas: heridas tibias, tiempo muerto,
son recuerdos de foto familiar
no supe mantenerme en pie y me dejé caer sobre las nubes
nadie se escapa, me arranqué las palabras crudas y no pude sangrar
son canciones perdidas para siempre
confesiones nocturnas al olvido.