A las seis en punto


Dejo la escoba
se lavo las manos
siguio cantando
pero muy bajito,
no se peino, no
ni lavo los platos
se le cayó el pastel
y se cambio el vestido

No leyo los diarios
para que tristeza
si al final de cuentas
siempre, siempre dicen lo mismo,
no quiso que nada
quebrara su fiesta
y al llegar la noche
se acosto contenta.

Temprano en la mañana
se levanto radiante
y escribio con dentifrico en el espejo del baño
un nuevo nombre
con su apellido.

Alzo la copa,
la copa vacia
y brindo por nadie,
llena de alegria,
le dijo un verso,
un verso de Withman
a la golondrina
que paso de prisa
se abrazo a la almohada
y la llevo bailando
intento una mueca
termino llorando
tuvo mucho miedo
pero fue tan lindo,
a las seis en punto
mi amiga tuvo un niño.