Nos comparo con una bandada.
Un oso polar ha violado a un cachorro.
Las paredes del palacio están llenas de tapices.
Y las ventanas están rotas y destrozadas.
Con un perro desmenuzado en cada aterrizaje.
Y cada extraño se agacha.
El vestido está desgarrado.
El tono exigente.
La fuerza oculta del colmillo.
Y sus lomos darían un aullido,
un ronroneo de latidos para robar el
tiempo con el que caminamos de la mano.
Oh! Cómo lo desprecio
Oh! Cómo disfruto la luz
De la primera mañana por siempre.
Sabiduría, etiqueta de riqueza.
Como sobre la placenta.
Te amaré por siempre.
Y si no hago,
y si hago.
La diferencia existe en una ficción.
El día se ha enfriado.
El tiempo se va también.
Y apalearemos la luz….