Calla, duerme, piensa, aún queda mucho por andar,
la carretera es tensa, y llueve sin parar.
Curvas, baches, bares, perros muertos sin collar,
y la música que tú... has traído para recordar...
aquella niña que sabe Dios, dónde estará.
Me paso la vida marcando un nueve uno,
cambiando de comida, con mi ropa oliendo a humo,
y tú estarás... dormida, en tu cuarto lleno de fotos,
y yo jugando mi partida, con los pantalones rotos,
intentando que la voz me aguante hasta el final,
donde tocaremos... "Sufre Mamón"
Ya en el camerino, bebe agua y relájate.
La toalla robada de un hotel, y los autógrafos que das.
Que no sabes su valor, que los das... ¿Por qué no darlos?
Y quisieras irte ya, te duele la espalda,
te miras a un espejo y ves sudor y whisky y agua
y mientras tú... estás en casa, donde el tiempo no pasa,
y no paro de pensar en ti, sueño con las calles de Madrid.
Y los técnicos recogen. Todo el mundo se ha ido ya,
ya no quedan ilusiones, sólo cajas que cargar,
y un camión que espera para llevarte a otro lugar,
donde tocaremos: "Sufre Mamón... Devuélveme a mi chica.".