Que no te miento cuando te digo que aun sigo temblando
cuando estoy hablando de la ultima vez
que me hiciste crecer esa fuerte raíz
agarrada siempre y fuertemente a tu jardín
no estás aquí cuando hablo de tí
con mi cama, mi techo y mis ganas de dormir
Y ahora que vuelves para volver a marcharte
y a reengancharme y a recordarme
lo grande de este amor intermitente
Pero tan derrepende sin precedentes
me vuelve valiente, me enseña los dientes
me pone de frente, para sorprenderme
y decir que te vas
y mi cara delante, insignificante
empieza ya a formar parte
de esta urna radiante
que se parte incesante para suplicarte
por favor no te vallas
Mi silencio suplica a la vez que te grita
que no cruces la puerta que aun esta maldita
cuando acabe la sesión esto es solo ilusión
unas horas por semana de tu escaso amor
que preguntan por ti cuando te ven partir
mi cama, mi techo y mis ganas de dormir.