Soy el maestro de las mentiras
Y no hay muchacha que se resista
A los chamullos que yo le ofrezco
Para jugar un rato al amor
Y me destaco por ser buen amante
Un lodo atorrante, q solo busca placer
Nos sirvo para el corazón
No siento penas, siempre juego en el amor
Y es mi condena,
De andar de madrugadas buscando
Alguien solo para pasar el rato