En un lugar al sur,
refugiados del frío y del deber,
entre el humo y el café,
cinco ratas y un viejo blues...
En un rincón olvidado,
chillaba una armónica,
y rompía el tiempo,
en millones de palabras...
Los gatos hambrientos,
buscaban su presa,
y todo estaba tranquilo,
en la cueva de ratas!...
Era un viernes diferente,
y disfrazados entre la gente,
este mundo sucio y arrogante,
les cerró el bar...
Sus bufandas enrroscadas,
y burlándose del viento,
con un rumbo bastante incierto,
recorrieron la ciudad...
Los gatos hambrientos,
buscaban su presa,
y todo estaba tranquilo,
en la cueva de ratas!...
Cuando logran escapar,
van a parar al mismo lugar,
porque no hay ninguna regla,
en la cueva de ratas...
Los gatos hambrientos,
buscaban su presa,
y todo estaba tranquilo,
en la cueva de ratas!....