Sí, todas esas estrellas caen como gotas de mantequilla,
las promesas son dulces.
Nosotros ofrecemos nuestras ollas y levantamos las mantos para capturarlo
y lo comemos y bebemos, arriba, arriba, arriba.
Hey, dejame entrar
hey, dejame entrar
Sólo deseo poder oír tu bajo susurro
señor pescador, en una tierra menos peculiar
él reunió a sus seres queridos y los trajo a todos
para decir adiós, buen intento.
Hey, déjame entrar
hey, déjame entrar
Tenía en mente tratar de detenerte, dejame entrar, dejame entrar,
Tengo alquitrán sobre mis pies y no puedo ver
a todas las aves mirando y riendose de mi
torpe, rastreando mi piel.