El Norte ya tiene otro nombre,
que en los arenales leyenda será,
cuando en las noches del valle
florezca el recuerdo del Payo Solá.
Alla en los rastrojos de Atocha,
Sampedro, Ledesma y El Arrayanal:
los bombos y las guitarras
perdieron el rastro del Payo Solá.
Pa’ l verano lo han de hallar,
justito pa’ l Carnaval,
rodeao de viejas carperas,
llorando en el fuelle del Payo Solá.
Un Marzo de vientos y sombras
se llevó las manos del Payo Solá.
Lo lloran los gauchos pobres,
los runas curtidos de la soledad.
Los viejos caminos de Salta,
los de Corralito, Cachi, Seclantás:
alla se van cuesta arriba,
rastreando los sueños del Payo Solá..