Ojalá que llueva café en el campo,
que caiga un aguacero de yuca y té,
del cielo una jarita de queso blanco
y al sur una montaña de berro y miel.
Oh, oh, oh, oh, oh... Ojalá que llueva café.
Ojalá que llueva café en el campo,
peinar un alto cerro de trigo y mapuey,
bajar por la colina de arroz graneado
y continuar el arado con tu querer.
Oh, oh, oh, oh, oh...
Ojalá el otoño en vez de hojas secas
pinte mi cosecha de pitisa alegre,
siembra una llanura de patata y fresas.
Ojalá que llueva café.
Oh, ojalá que llueva café en el campo
peinar un alto cerro de trigo y mapuey,
bajar por la colina de arroz graneado
y continuar el arado con tu querer.
Ah, ailaralailala, ailarala, ailaralailala
ojalá que llueva café.
Pa´ que la realidad no se sufra tanto,
ojalá que llueva café en el campo.
Pa´ que en Villa Hidalgo oigan este canto,
ojalá que llueva café en el campo.
Pa´ que todos los niños canten este canto,
ojalá que llueva café en el campo.
Ojalá que llueva, ojalá que llueva,
ojalá que llueva café en el campo.