Mil razones y un por qué


Hay algo en ella que él no ve,
que no le deja estar en pie,
que se resiste a responder.

Cuando parece que va bien,
ella da un giro sin saber,
donde se quiere detener.

Y se encuentra en medio de la nada,
buscando la manera de entender,
mil razones y un por qué.

Hablando hasta el amanacer,
comparten más que algún café,
son prisioneros de su piel.

Dos trapecistas que sin red,
intentan no desfallecer,
jugando con su sensatez.

Y se acuestan espalda contra espalda,
clavando la mirada en la pared,
mil razones y un por qué.

Han visto naufragar, sus ansias de querer,
mil razones y un por qué,
no tienen voluntad, intentan esconder,
mil razones y un por qué
mil razones y un por qué.

La certeza de un muro que se acerca,
resalta la incoherencia de tener,
mil razones y un por qué.

Han visto naufragar, sus ansias de querer,
mil razones y un por qué,
no tienen voluntad, intentan esconder,
mil razones y un por qué.
Se besan por probar, si aún les queda fé,
mil razones y un por qué,

Lo llaman amistad, extraños en un tren,
mil razones y un por qué..