Volver a Santiago es volver a vivir
un tiempo remoto que supo dejar
afecto, utopía y memoria
y esa torpeza en cosas de amor.
A veces el milagro de volver
se vuelve talismán contra el dolor
dolor que uno ni sabe de dónde viene
pero nos trae lo que pudo ser, y no fue.
Volver, volver, volver .......
Volver a Santiago es volver a concluir
que con la nostalgia se endulza el mirar
y así, de un respiro la vida
y nos susurra "Ya puedes seguir"
Y yo era tan feliz a pesar
de que a mi alrededor se abrían ya
heridas que aún reclaman ser cicatrices
buscan perdón sin la tentación de olvidar.
Volver, volver, volver .........
Volver a Santiago es volver a leer
un libro manchado de grasa y café
que ya no nos dice lo mismo
y de fellini, no sé que quedó.
Me llueve dentro del corazón
oyendo a Milanés y con Serrat
en esta tarde mansa el sol mira patras
alumbra el eco de lo que yo fuí y no soy.
Volver, volver, volver ..........