Lucrecia Y Rigoberto
Cuando las almas van enredadas
No hay más que un mar de pasión
Van enlazadas, acaraciadas y no hay más
Que el olor de su amor
Me gustas tú, Rigoberto
Y tú, y tú, y tú
Pero por encima de todas tus otras cosas
Me gustan tus orejas voladoras
Entre dos almas enamoradas
Sólo hay juegos de seducción
Ven juntito a mí
Que te quiero besar
Ven juntito a mí
No te arrepentirás
Ven juntito a mí
Tu lenguita he de acariciar
Y si me dejas
Iré más lejos, ya verás
Puedo ver, que en amor
El inicio, tiene tanto placer
Y ven juntito a mí
Que te quiero besar
Ven juntito a mí
No te arrepentirás
Ven juntito a mí
Tu lenguita he de acariciar
Y si me dejas
Iré más lejos, ya verás.