Porque hay velas que con el viento se apagan,
Y otras en cambio con su fuerza envían mi navío a puerto,
Los hay que pegan, también los hay que pagan,
Mientras yo apago las pegas que me apegan a lo incierto,
Su sombra me dejo más de un mensaje en el espejo,
Y un pintalabios rojo me mojó de sentimientos,
Como el incienso fue consumiendo mi ser,
Hasta caer en la miseria de la histeria y el cortejo,
El bienestar baila de lejos y empareja mientas ella se alimenta
De mis quejas y lamentos, dejo en sus manos los cimientos de mi fe,
Ya me deshice por dentro, la intención es lo que cuenta,
Crece con ayuda de la bruma de mis dudas, y golpea con el eco
Dentro de lagunas secas, abrazado al caos no reconforta las ideas,
Vivo al filo de una piedra tallada por los aztecas, shh,
Solo hay silencio, un distanciamiento de lo que presencio y siento
Me sentenció, convenció a mi discreción si elección alguna,
Y así fue mi reacción ante su cambio de postura,
Voz interior sufre afonía, miedo no la oía, fe huía lejos de odio y rencor,
En esa situación nació rechazo, que manía,
a sangre fría la cazó de un tiro al corazón,
ya no respira, quiero salir de aquí
y del sin vivir al que serví de maniquí,
sin ti no hay mi, solo hay mentiras,
cambié mi sonrisa por esta habilidad falsa,
y el tiempo pasa y pesa, restando puntos de vida,
toca mis venas con el arco de un violín pero no sangran,
puntea cada vena con los dedos, preso del miedo, pero lejos de París,
mis aullidos de tristeza se invirtieron en palabras,
flota el nenúfar en el turbio mar del pésame, dice bésame,
presa de la dejadez, y no me escucha,
me acusa de ser débil o febril, ante la escusa de que la prisa
me apresa en el papel, es mi lucha, gris, como un texto de Nietzsche,
hoy sin ser, un ser vivo, servidor del triste,
calles de fama la llaman madera santa,
tengo un nudo en la garganta que persiste contra mi.
[Estribillo]
Danzo al compás de sus latidos, el hibrido,
Fusión de lo buscado, lo encontardo y lo perdido hoy,
Sobre una pluma, a la merced del viento,
Deshaciendo las costuras de lo que ellos creen que soy. (x2)
Queda el pespunte de un indigente adulto,
mutante del insulto social que ausente asiente,
al instante, fruto de un inconveniente, deja de negociar vida,
otorgándoles la muerte, descomposición en composición de aura,
a la mala emoción se la castiga con el alma, como jaula,
una deuda sin patrón, un mal trato y un mal rato atroz,
a manos de su ángel de la guarda,
Es el 23 a top secret, mi obsesión, presión de querer ser,
que se reduce a frustración, ves, son versos que sobrarían,
desafío al corazón, sin motivo ni valía, no lo crees,
dicen que conmigo no se habla se discute, calla,
dale al mute, no soporto que me griten,
ya te he oído, no me irrites, aquí todo repercute,
solo pido que lo evites, por ello somos amigos,
discípulo errante, de un error punzante, por no pensar antes,
que la vida sigue, vivía al instante, hasta que fue tarde,
y tuve que acostumbrarme a vivir como todos viven,
nada de del lío al compromiso, si el compromiso es un lío,
nada de, te doy permiso, yo mismo soy mío, y tu eres tuya,
excepto cuando sonrío, a la vez que sello el sobre de ternura que te envío,
pobres de bienes, ricos en emociones, ganan mil opciones,
cuando aprecien lo que tienen, hay mil opiniones,
pero dime de quien vienen, hay quien se entretiene acordonando conclusiones,
son inmunes, mezcla del negro y el ocre, yo niño versus hombre,
con costumbres comunes y vulnerable, como el CO2 de un túnel,
soy culpable, de no querer a nadie como quiero a mi madre.
[Estribillo]
Danzo al compás de sus latidos, el hibrido,
Fusión de lo buscado, lo encontardo y lo perdido hoy,
Sobre una pluma, a la merced del viento,
Deshaciendo las costuras de lo que ellos creen que soy. (x2)
Esto es tan solo un pequeño recorrido por el lóbulo frontal de mi cerebro,
allí donde habitan las emociones, el motor, la personalidad y el razonamiento,
cada persona es un mundo, pero es difícil que el mundo no afecte a la persona,
esto se llama el hibrido, mezcla de blanco, negro y ocre, de lo que encontré
y de lo que perdí… yeah…