Mi esqueleto


Mi esqueleto
Al nacer me asignaron
como a todos
un fragil esqueleto
muy pequeño.
Le acepté
y cuidé
año tras año
y crecíamos los dos
al mismo tiempo
y así convivimos juntos

el procura no hacerse notar mucho
mi esqueleto es muy modesto.

Yo procuro que él también se sienta a gusto
incluso le llevo a visitar paises extranjeros

procuro que no sufra ningún daño
que le cause privarse de algún hueso

le hospedo deferente
y hasta le animo
a que haga el amor con otros esqueletos

y esto es lo que a él más le gusta
mayormente
y luego descansar,
y hacerse el muerto,
y hacerse el muerto.

Me place imaginar que cuando muera
mi esqueleto va a quedar al descubierto;
representará entonces lo que fui
mientras viví
y entonces creo,
creo que así,
se sentirá más cómodo
completo.