Fue nuestro amor una ardiente pasión,
radiante luz que llenaba mi sensible corazón.
No es posible, inconcebible que esa llama se apagó.
Quizás fue solamente una ilusión de los dos
y qué más da, si al final me enseñaste a querer.
Ente tus brazos, viví tantas noches de placer;
y si el tiempo y la distancia nos ayudan al olvidar,
volveremos amar.
Mi querido amor,
fue nuestro amor un ardiante pasión,
que transformó nuestras almas,
pero ya terminó.
Donde quiera que tú vayas te deseo lo mejor,
que seas feliz, feliz, adiós.
No hay mal que por bien no venga,
no hay mal que por bien no venga,
no hay mal, no hay mal.
No hay mal que por bien no venga,
no hay mal, no hay mal.
No hay mal que por bien no venga,
no hay mal, no hay mal.
No hay mal, no hay mal.
No hay mal que por bien no venga,
no hay mal, no hay mal.......