Si la vida te trata mal
y te quedas atrás.
Algo en ti dirá que ¡ basta ya !
metes el codo, luchas por salir.
No serás, carne de cañón
pones los medios, impide caer.
Cuantas las veces tienes que callar
te tragas las ganas por no molestar
piensas que todo pronto cambiará
mueves los hombros todo te da igual
luego presientes que nada sirvió
pierdes las fuerzas no puedes seguir.
Rendirse no es la solución
pierdes hasta el honor.
Defenderse es la única opción
de sobrevivir.
Preparado estoy
dispuesto a atacar
fuerte y en cualquier lugar.
Rompe el cielo y ves aparecer
la mano que te salva cuando al límite estás.
Mil pedazos de tierra sangrarán
en el cruce de caminos dicen cuál has de tomar.
Saltarán en lágrimas el mar
bañando tus ojos para hacerte despertar.
Respirar aires de libertad
cuando al grupo Al Borde escuches tocar.
Tu cabeza no inclinarás
cualquier reto debes afrontar.
Mas abajo no puedes estar
caes en el fondo, tocas el final.
Sin pensar te acostumbrarás
a vivir al borde, a hacerlo tu hogar.
Las manos sucias que te empujarán
oscuros deseos quieren engañar
voces vacías impiden gritar
tapan tu boca quieren estorbar
una salida tienes que encontrar
no importa el modo debes pelear.
Rendirse no es la solución
pierdes hasta el honor.
Defenderse es la única opción
de sobrevivir.
Preparado estoy
dispuesto a atacar
fuerte y en cualquier lugar
Rompe el cielo y ves aparecer
la mano que te salva cuando al límite estás.
Mil pedazos de tierra sangrarán
en el cruce de caminos dicen cuál has de tomar.
Saltarán en lágrimas el mar
bañando tus ojos para hacerte despertar.
Respirar aires de libertad
cuando al grupo Al Borde escuches tocar.
( VOCES )
( SOLO )
Rendirse no es la solución
pierdes hasta el honor.
Defenderse es la única opción
de sobrevivir.
Preparado estoy
dispuesto a atacar
fuerte y en cualquier lugar.
Rompe el cielo y ves aparecer
la mano que te salva cuando al límite estás.
Mil pedazos de tierra sangrarán
en el cruce de caminos dicen cuál has de tomar.
Saltarán en lágrimas el mar
bañando tus ojos para hacerte despertar.
Respirar aires de libertad
cuando al grupo Al Borde escuches tocar.